AMAPOLA TUCUMANA
Ahora que fulguras desnuda en la penumbra
y me roza el murmullo de tu busto exuberante,
Ahora que tus senos son dos ventrículos
latiendo en mis oídos como ríos de música;
Ahora que en mis sienes siento dos "te quiero"
y tus besos me deja en la frente un tatuaje,
ahora que tu remera y tu pantalón blanco
hieren mi mano ardiente como al diente la fruta:
Deshojada ya yaces, amapola tucumana.
Yo pescador capturado o encallado velero,
yo también yazgo ahora en tu blanca arena
En silencio contemplo el templo de tu cuerpo,
me afano y me afino de oído y de tacto
y oigo bajo tu piel una gemido intacto
de un "te quiero" amapola tucumana